El Morbero de sanidad




El Morbero de Sanidad: Transcurría la primavera del año 1817, los pájaros revoloteaban por los árboles lanzando al aire sus alegres cantos intentando atraer a su futura pareja, las cosechas maduraban en los verdes campos de la Vega, las aguas del río se deslizaban muy rápidas después de las últimas lluvias de abril.
La noticia de que un barco atracado en Málaga portaba el Cólera Morbo, recorrió como un reguero de pólvora toda la costa mediterránea. El Alcalde de la Villa de Guardamar Andrés García Lillo convocó a la Junta de Propios y al Ayuntamiento  al conocer la noticia, la fatalidad había hecho que el Morbero de la Villa Tomás Zaragoza, (cuya obligación consistía en impedir el desembarco de personas o mercancías, antes de comprobar la Junta de Sanidad que el barco no estaba contaminado de la enfermedad) había fallecido recientemente.
 El Alcalde dijo a los reunidos: Que la Junta Municipal de Sanidad de Alicante había enviado tres solicitudes para cubrir la plaza de Morbero vacante, los candidatos eran: Manuel Aracil, José Rodríguez Sánchez y José Manuel Zaragoza, (hermano del fallecido) para que entre los miembros de la Corporación decidieran que persona era la más idónea.
Después de revisar los expedientes de los candidatos la Junta se decidió por Manuel Aracil, por considerar que era el candidato que tenía mejores conocimientos, puesto era hijo del anterior Escribano de Ayuntamiento Tomás Aracil, por lo que tiene una mejor educación. Que su honradez era conocida en todos los destinos “honrosos que había tenido dentro o fuera de esta Villa.” Y en fin que poseía todos los requisitos para desempeñar dicho destino.
En cuanto a los otros candidatos, José Rodríguez apenas sabía leer ni escribir por lo que no era apto para llevar la cantidad de papeles que requiere el oficio, y José Manuel lo había solicitado para su sobrino que era hijo del finado, éste se llamaba Tomás y era menor  de edad pues tenía 16 año, a la vez que su instrucción era escasa, tenía antecedentes de mala conducta, se había escapado de casa dos veces, la última lo detuvieron los Miñones en la Villa de Aspe.
Por lo tanto el candidato idóneo era Manuel, al cual se le notificó el nombramiento y se le hizo jurar por Dios y por la señal de la Cruz que cumpliría fielmente el cargo de Morbero, entregándole después todos los papeles del anterior poseedor del cargo.

José Viudes Amorós. Vocal de l’Institut d’Estudis Guardamarencs.

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